Miles de personas prueban ChatGPT, Gemini o Claude… y se frustran.
Piden algo, el resultado es mediocre y piensan:
- “La IA no es para mí.”
- “Esto no sirve.”
- “Mejor lo hago yo.”
Pero la realidad es muy distinta.
La IA no falló.
👉 Falló la forma de pedirle las cosas.
Es como exigirle a un asistente humano resultados increíbles sin darle instrucciones claras.
Los prompts son el idioma en el que nos comunicamos con la inteligencia artificial.
Aprenderlo es, hoy por hoy, la habilidad digital más poderosa para trabajar menos y conseguir más.
Este artículo «Guía de Prompts: Cómo ‘hablarle’ a la IA para que haga el trabajo sucio por ti» te enseñará a escribir prompts que funcionan de verdad, incluso si nunca has hecho prompt engineering.
Por qué la IA “no funciona” para la mayoría de personas
La IA no es adivina.
No sabe:
- tu contexto
- tu estilo
- tu objetivo
- tu nivel
- tu sector
- tu intención
Si solo escribes:
«Hazme un texto sobre redes sociales.»
La IA hará su mejor intento… pero sin contexto, será genérico.
No falla la IA: falla la forma de pedirle las cosas
La IA responde a lo que le pides, no a lo que quisiste decir.
Es extremadamente literal, y por eso:
- un prompt vago produce resultados débiles
- un prompt claro produce resultados brillantes
Pedir bien = 80% del éxito.
Qué es un prompt y por qué es la habilidad digital nº1 de 2025
Un prompt es una instrucción.
Pero un buen prompt es una estrategia.
Incluye:
- contexto
- rol
- objetivo
- límite
- formato
- ejemplos
- tono
- pasos
Quien domina esta estructura puede:
- escribir más rápido
- analizar documentos sin esfuerzo
- crear contenido profesional
- automatizar tareas
- mejorar procesos
- multiplicar productividad
La diferencia entre pedir y dirigir
Pedir:
“Hazme un email.”
Dirigir:
“Escribe como un asistente profesional un email breve y cordial para recordar un pago pendiente. Tono amable pero firme. Incluye fecha límite y firma personalizada.”
La diferencia en resultados es abismal.
Regla 1: El contexto lo es todo
La IA necesita saber:
- quién eres
- qué necesitas
- para quién escribes
- en qué tono
- con qué propósito
Ejemplo pobre:
“Haz un post para Instagram.”
Ejemplo profesional:
“Eres un copywriter experto en redes sociales. Crea un post para Instagram dirigido a emprendedores que pasan horas gestionando tareas manuales. Tono cercano, optimista y claro. Extensión: 4 líneas.”
Cómo explicar quién eres y qué necesitas
Un prompt completo incluye:
- “Actúa como…”
- “Tu objetivo es…”
- “El público es…”
- “El tono debe ser…”
- “El formato final será…”
Sin esto, la IA improvisa.
Regla 2: Pide el resultado, no la herramienta
En lugar de decirle cómo hacerlo, dile qué necesitas.
Ejemplo débil:
“Escribe un texto usando storytelling.”
Ejemplo fuerte:
“Crea un texto que conecte emocionalmente, comenzando con una anécdota realista que refleje el problema de perder tiempo en tareas manuales.”
Cuando pides el resultado, la IA elige la mejor técnica.
Cómo evitar respuestas genéricas o “de estudiante”
Dile a la IA lo que NO quieres:
- “Evita clichés.”
- “No uses frases rellenito.”
- “Sé concreto y profesional.”
Y dile lo que SÍ quieres:
- “Ejemplos específicos.”
- “Lenguaje simple.”
- “Ideas accionables.”
Regla 3: Dale a la IA ejemplos buenos y malos
La IA aprende por demostración.
Aprendizaje por demostración
Prompt:
“Este es un ejemplo del estilo que quiero:
[texto bueno]
Este es un ejemplo del estilo que NO quiero:
[texto malo]
Ahora escribe un texto con el estilo del primero y evitando el segundo.”
Este truco multiplica calidad de salida.
Regla 4: Divide tareas complejas en pasos pequeños
Una IA funciona como una cadena lógica.
Si le pides algo enorme en un solo prompt, se bloqueará.
La técnica del “prompt por capas”
- “Dame un esquema.”
- “Desarrolla el punto 3.”
- “Transforma ese punto en un texto persuasivo.”
- “Adáptalo al formato Instagram.”
- “Genera 5 versiones.”
Mucho más preciso que hacerlo de golpe.
Regla 5: Usa roles, formatos y restricciones
Roles:
- eres un abogado
- eres un consultor
- eres un diseñador
- eres un experto en productividad
- eres un profesor
Formatos:
- tabla
- lista de pasos
- guion
- resumen
- texto para redes
Restricciones:
- máximo 150 palabras
- tono directo
- sin tecnicismos
- lenguaje simple
Cómo dirigir el tono, estilo y estructura
Prompt:
“Escribe con tono amable, profesional y claro. Oraciones cortas. Estilo cercano. Sin palabras rebuscadas. Máximo 6 líneas. Cierra con una recomendación práctica.”
La IA no se desvía.
10 prompts listos para usar que te ahorrarán horas
1. Para escribir emails profesionales
“Actúa como un asistente ejecutivo. Redacta un email breve, amable y directo para [objetivo]. Incluye CTA clara y tono profesional.”
2. Para resumir documentos
“Resume este documento en 10 puntos clave, usando lenguaje simple y evitando detalles irrelevantes.”
3. Para corregir textos
“Reescribe este texto para que suene más profesional, claro y ordenado. Mantén el mensaje original.”
4. Para crear contenido
“Genera 5 ideas de contenido para Instagram dirigidas a [público], tono [estilo], objetivo [meta].”
5. Para clasificar información
“Convierte este texto en una tabla con columnas: Problema, Causa, Solución propuesta.”
6. Para brainstorming
“Dame 10 ideas creativas y poco comunes para [tema], evitando clichés.”
7. Para analizar problemas
“Identifica los 5 problemas principales en este texto y sugiere soluciones accionables.”
8. Para mejorar procesos
“Propón mejoras para este flujo de trabajo. Objetivo: reducir tiempo y errores.”
9. Para planificar tareas
“Genera un plan semanal para lograr [objetivo] dividido en microtareas diarias.”
10. Para vender o persuadir
“Escribe un texto persuasivo usando beneficios, no características. Público: [X]. Tono: cercano.”
Errores comunes al escribir prompts (y cómo corregirlos)
1. Ser demasiado vago
❌ “Haz un texto inspirador.”
✔️ “Escribe un texto inspirador para emprendedoras, tono realista, 6 líneas, final motivador.”
2. Olvidar el contexto
❌ “Resume esto.”
✔️ “Resume esto para un público sin conocimientos técnicos.”
3. Pedir cosas imposibles
La IA no puede:
- predecir el futuro
- saber datos privados
- reemplazar expertise humano
4. No revisar lo que entrega
La IA es potente, pero no perfecta.
Caso real: Cómo una emprendedora duplicó su productividad aprendiendo a escribir mejores prompts
Una profesional decía:
“Lo intenté con la IA, pero me hace textos malos.”
Tras una sesión sobre prompts:
- aprendió a dar contexto
- creó plantillas de prompts reutilizables
- definió tonos, ejemplos y restricciones
- automatizó parte de su contenido
Resultado:
- duplicó su producción de contenido
- redujo errores
- ganó horas semanales
- dejó de frustrarse
El problema nunca fue la IA.
Fue el promedio de los prompts.
Cómo una consultora como Dalia Vicente enseña a usar IA de forma estratégica
Dalia no solo implementa IA:
enseña a sacarle verdadero partido.
Su enfoque combina:
✔️ Educación (cómo hablar con la IA)
✔️ Procesos claros (qué pedirle)
✔️ Automatizaciones (que la IA trabaje sola)
En sus consultorías, muchas personas descubren que con buenos prompts:
- escriben mejor
- automatizan tareas
- ahorran tiempo
- toman decisiones más rápido
- reducen carga mental
Su valor no es solo técnico:
es enseñar a pensar de forma más inteligente.
Puedes ver sus servicios aquí:
👉 https://daliavicente.es/servicios/
